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Help Nadia / Ayuda a Nadia

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Help Nadia! 

"Hello, I am Nadia, and I am 35 years old. My children are Mahmoud, 13 years old, Furqan, 11 years old, and Abdul Rahman, 8 years old. My daughter dreams of being a lawyer, and my youngest son wants to be an engineer. Mahmoud wants to be an actor and a painter. We are from Syria, from a city called Manbij.


In Lebanon, there is no work. We try to work in everything we can. Some months we earn a little money, like 15 dollars, and other times we are lucky to make 30 dollars. I cannot afford to pay for my children's school, so they cannot go. Sometimes they ask me for food, but I can't buy it, not even bread. It has been a year since my children last ate fruits. But the worst thing is our house rent, which is 150 dollars for one room, a small kitchen and a bathroom. You can see the math doesn't work for us.


My husband was working when a box of tiles fell on his head. He got 45 stitches on his head. 

Since then, he can't work well. He gets strong headaches, and the pain is unbearable sometimes.


We are so hungry all the time, but I have to prioritize keeping a roof over our heads because we won’t survive on the streets. Please, if you can, help us with rent or provide some food if you're in Lebanon. I'm also willing to work if you can offer any opportunities. I'm truly desperate—any assistance would mean the world to us."



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¡Ayuda a Nadia! 

"Hola, soy Nadia y tengo 35 años. Mis hijos son Mahmoud, de 13 años, Furqan, de 11 años, y Abdul Rahman, de 8 años. Mi hija sueña con ser abogada y mi hijo menor quiere ser ingeniero. Mahmoud quiere ser actor y pintor. Somos de Siria, de una ciudad llamada Manbij.


En el Líbano no hay trabajo. Intentamos trabajar en todo lo que podemos. Algunos meses ganamos un poco de dinero, como 15 dólares, y otras veces tenemos la suerte de llegar a ganar 30 dólares. No puedo permitirme pagar la escuela de mis hijos, por eso no pueden ir. A veces me piden comida, pero no puedo comprarla, ni siquiera pan. Ha pasado un año desde la última vez que mis hijos comieron fruta. Pero lo peor es el alquiler de nuestra casa, que cuesta 150 dólares por una habitación, una pequeña cocina y un baño. Puedes ver que las cuentas no salen.


Mi marido tuvo un accidente trabajando. Una caja con baldosas se le cayó encima. Le tuvieron que dar 45 puntos en la cabeza. 

Desde entonces, no puede trabajar bien. Tiene fuertes dolores de cabeza y, a veces, el dolor es insoportable.


Pasamos hambre todo el tiempo, pero tengo que priorizar tener un techo sobre nuestras cabezas porque no sobreviviremos en la calles. Por favor, si puedes, ayúdanos con el alquiler o dandonos algo de comida si estás en el Líbano. También estoy dispuesta a trabajar si puedes ofrecerme alguna oportunidad. Estoy realmente desesperada; cualquier ayuda significaría mucho para nosotros”.